miércoles, 30 de diciembre de 2009

Acaba el año 2009

Ayer acudí a escuchar el concierto de Navidad, que daba el coro de jubilados en el que canta mi madre. Era en la residencia de tercera edad de Berra, en Altza mi barrio. Está situado sobre el puerto de Pasajes, camino a mi antiguo colegio "Las anunciatas"... acabó siendo un paseo por mi pasado.
Me encontré con la gente de mi infancia, que resultó estar repleta de mujeres. Iba con mi hermana Estibalitz y su amiga Blanca para escuchar cantar a mi madre. Me encontré a muchas de sus amigas que me saludaban porque hacía mucho que no me veían (yo casi no les veo porque me costaba reconocerles) Vi a la madre de mi amiga, a mi amiga, a sus sobrinas, a su hermana, a alumnas de costura de mi madre... mujeres estupendas resistentes al paso del tiempo.
Regresé sola paseando por la noche en medio de lo que era el campo. Todo me parecía nuevo, me sorprendieron de repente las luces de la autopista... hasta este momento no me había percatado mientras conducía por ella de que atravesaba por los paisajes de mi niñez, no lo había visto... ahora caía en la cuenta del paso del tiempo.
Justo por ese terraplén que ahora surcaba la autopista, caía peleándome con los chicos y perdiendo todos los botones de mi chubasquero... esos que mi madre me envió después a buscar inútilmente...
Después el paisaje seguía parecido... la casa de amores de niña... la casa de mi amiga... ¿Darieta? ¿Dónde está el caserío Darieta?... Esto está repleto de chalets... a continuación el nuevo polideportivo… por ese camino topamos con el exhibicionista contra el que me preparaba con piedras y llena de valiente miedo... jajaja....
Ha pasado el tiempo, muchos años. Este año lo he aprovechado. He vuelto a dejar de fumar, estoy aprendiendo a perdonarme y reaprendiendo a disfrutar... y ya hemos decidido volver a casa. Necesitamos reconocernos en cada rato. No quiero de repente sentirme como ayer.